Compañeros:
Hay un diario muy triste que delata la cruda realidad de los perritos abandonados, en mi larga vida como activista, y protectora de los derechos de los animales lo he constatado de forma real, muchos animalitos son abandonados por sus dueños amarrados con alambres a postes en la calle y de tanta desesperación se jalonean el alambre y casi se degollan con el mismo algunos si logran degollarse, o son arrojados desde los autos a las vías de alta velocidad con el claro propósito de que mueran de manera terrible, algunos son abandonados en los camellones alternos al metro para que no puedan seguir a sus "dueños", algunos más son "embolsados" asi tal cual en bolsas grandes de plástico o metidos en cajas de cartón amarrados con lasos o correas y arrojados a canales de desagües vivos si, asi es, vivos, me toco rescatar en varias ocasiones a una gatita con sus crías en una caja de cartón tan herméticamente selladas que algunos gatitos ya habían fallecido de asfixia, y algunos que habían sido abandonados dentro de bolsas de plástico igual habían corrido con la misma suerte, solo en una ocasión logre divisar una cosita que se movía dentro de una bolsa con desesperación y si era una cachorrita pequeña que había sido embolsada y arrojada en la calle para morir, pero gracias a Dios la había encontrado aún con vida.
En mi camino largo tortuoso y difícil del rescate animal que en principio mi actividad principal era el recoger y dar en adopción pero al percatarme del grado de crueldad en que sus "pseudodueños" los sometían, me incorpore a la fase más dramática del activismo: el rescate.
En esa etapa en la cual me mantengo hasta el momento ya en menor participación pero vigente y vigilante, he presenciado verdaderos actos de horror, verdaderos actos que defenestran por completo al ser humano, superando a la peor de las bestias salvo que estas las bestias matan por hambre, pero he conocido al ser humano en su actos más bajos, más perversos y más ruines que jamás pensé ni en mis más terribles pesadillas presenciar.
Actos verdaderamente viles cometidos contra pequeños seres indefensos llegaron a cambiar completamtne mi percepción del ser humano como ente civilizado e incluso llegarle a perder el respeto pero aclaro que por supuesto no a todos pero si llegue a sentirme profundamente decepcionada de la raza humana en general. Actos tan detestables que por poco logran quebrar mi propia fortaleza emocional y psíquica, por ello por un tiempo y por completa salud mental me aleje del rescatismo por dos años, ahora he vuelto mas moderada pero al fin vuelto, con un poco más de dureza en el alma para así tener el temple adecuado para no quebrarme nuevamente como en el pasado donde incluso junto con varias amigas protectoras de verdad deseábamos mejor igual desaparecer de la faz de la tierra al presenciar actos tan horrendos que por si mismos eran inaceptables, llegamos a pensar que vivíamos en una terrible pesadilla mas no en la realidad.
Así las cosas, el respeto hacia las almas menos favorecidas y más desprotegidas a los que nosotros les llamamos "los sin voz", o "nuestros pequeños hermanos", ha sido una constante en mi vida y por ello quiero aquí tomar este pequeño espacio para ir contándoles todos los horrores vividos pero también las cosas más hermosas, verdaderos actos de amor y de fé, verdaderos milagros de la vida misma, pequeños actos de verdadera constricción humana me hicieron recuperar de alguna manera un poco de respeto hacia nuestra condición de seres humanos.
Eh aquí el Diario de un perro:
DIARIO DE UN PERRO.
Semana 1:
Hoy cumplí una semana de nacido, ¡Qué alegría haber llegado a este mundo!
Mes 1:
Mi mamá me cuida muy bien. Es una mamá ejemplar.
Mes 2:
Hoy me separaron de mi mamá. Ella estaba muy inquieta, y con sus ojos me dijo adiós. Esperando que mi nueva 'familia humana' me cuidara tan bien como ella lo había hecho.
Mes 4:
He crecido rápido; todo me llama la atención. Hay varios niños en la casa que para mí son como 'hermanitos'. Somos muy inquietos, ellos me jalan la cola y yo les muerdo jugando.
Mes 5:
Hoy me regañaron. Mi ama se molestó porque me hice 'pipí' adentro de la casa; pero nunca me habían dicho dónde debo hacerlo. Además duermo en la recámara... ¡y ya no me aguantaba!
Mes 12:
Hoy cumplí un año. Soy un perro adulto. Mis amos dicen que crecí más de lo que ellos pensaban. Que orgullosos se deben de sentir de mi.
Mes 13:
Qué mal me sentí hoy. 'Mi hermanito' me quitó la pelota. Yo nunca agarro sus juguetes. Así que se la quité. Pero mis mandíbulas se han hecho muy fuertes, así que lo lastimé sin querer. Después del susto, me encadenaron casi sin poderme mover al rayo del sol. Dicen que van a tenerme en observación y que soy ingrato. No entiendo nada de lo que pasa.
Mes 15:
Ya nada es igual... vivo en la azotea. Me siento muy solo, mi familia ya no me quiere. A veces se les olvida que tengo hambre y sed. Cuando llueve no tengo techo que me cobije.
Mes 16:
Hoy me bajaron de la azotea. De seguro mi familia me perdonó y me puse tan contento que daba saltos de gusto. Mi rabo parecía reguilete. Encima de eso, me van a llevar con ellos de paseo. Nos enfilamos hacia la carretera y de repente se pararon. Abrieron la puerta y yo me bajé feliz creyendo que haríamos nuestro 'día de campo'. No comprendo por qué cerraron la puerta y se fueron. '¡Oigan, esperen!' Se... se olvidan de mí. Corrí detrás del coche con todas mis fuerzas. Mi angustia crecía al darme cuenta, que casi me desvanecía y ellos no se detenían: me habían olvidado.
Mes 17:
He tratado en vano de buscar el camino de regreso a casa. Me siento y estoy perdido. En mi sendero hay gente de buen corazón que me ve con tristeza y me da algo de comer. Yo les agradezco con mi mirada y desde el fondo con mi alma. Yo quisiera que me adoptaran y sería leal como ninguno. Pero sólo dicen 'pobre perrito', se ha de haber perdido.
Mes 18:
El otro día pasé por una escuela y vi a muchos niños y jóvenes como mis 'hermanitos'. Me acerqué, y un grupo de ellos, riéndose, me lanzó una lluvia de piedras 'a ver quién tenía mejor puntería'. Una de esas piedras me lastimó el ojo y desde entonces ya no veo con él.
Mes 19:
Parece mentira, cuando estaba más bonito se compadecían más de mi. Ya estoy muy flaco; mi aspecto ha cambiado. Perdí mi ojo y la gente más bien me saca a escobazos cuando pretendo echarme en una pequeña sombra.
Mes 20:
Casi no puedo moverme. Hoy al tratar de cruzar la calle por donde pasan los coches, uno me arrolló.
Según yo estaba en un lugar seguro llamado 'cuneta', pero nunca olvidaré la mirada de satisfacción del conductor, que hasta se ladeó con tal de centrarme. Ojalá me hubiera matado, pero sólo me dislocó la cadera. El dolor es terrible, mis patas traseras no me responden y con dificultades me arrastré hacia un poco de hierba a la ladera del camino.
Mes 21:
Tengo 10 días bajo el sol, la lluvia, el frío, sin comer. Ya no me puedo mover. El dolor es insoportable. Me siento muy mal; quedé en un lugar húmedo y parece que hasta mi pelo se está cayendo. Alguna gente pasa y ni me ve; otras dicen: 'No te acerques'.
Ya casi estoy inconsciente; pero alguna fuerza extraña me hizo abrir los ojos. La dulzura de su voz me hizo reaccionar. 'Pobre perrito, mira como te han dejado', decía... junto a ella venía un señor de bata blanca, empezó a tocarme y dijo: 'Lo siento señora, pero este perro ya no tiene remedio, es mejor que deje de sufrir'. A la gentil dama se le salieron las lágrimas y asintió. Como pude, moví el rabo y la miré agradeciéndole me ayudara a descansar. Sólo sentí el piquete de la inyección y me dormí para siempre pensando en por qué tuve que nacer si nadie me quería.
La solución no es echar un perro a la calle, sino educarlo. No conviertas en problema una grata compañía. Ayuda a abrir conciencia y así poder acabar con el problema de los perros callejeros
Saludos
Hay un diario muy triste que delata la cruda realidad de los perritos abandonados, en mi larga vida como activista, y protectora de los derechos de los animales lo he constatado de forma real, muchos animalitos son abandonados por sus dueños amarrados con alambres a postes en la calle y de tanta desesperación se jalonean el alambre y casi se degollan con el mismo algunos si logran degollarse, o son arrojados desde los autos a las vías de alta velocidad con el claro propósito de que mueran de manera terrible, algunos son abandonados en los camellones alternos al metro para que no puedan seguir a sus "dueños", algunos más son "embolsados" asi tal cual en bolsas grandes de plástico o metidos en cajas de cartón amarrados con lasos o correas y arrojados a canales de desagües vivos si, asi es, vivos, me toco rescatar en varias ocasiones a una gatita con sus crías en una caja de cartón tan herméticamente selladas que algunos gatitos ya habían fallecido de asfixia, y algunos que habían sido abandonados dentro de bolsas de plástico igual habían corrido con la misma suerte, solo en una ocasión logre divisar una cosita que se movía dentro de una bolsa con desesperación y si era una cachorrita pequeña que había sido embolsada y arrojada en la calle para morir, pero gracias a Dios la había encontrado aún con vida.
En mi camino largo tortuoso y difícil del rescate animal que en principio mi actividad principal era el recoger y dar en adopción pero al percatarme del grado de crueldad en que sus "pseudodueños" los sometían, me incorpore a la fase más dramática del activismo: el rescate.
En esa etapa en la cual me mantengo hasta el momento ya en menor participación pero vigente y vigilante, he presenciado verdaderos actos de horror, verdaderos actos que defenestran por completo al ser humano, superando a la peor de las bestias salvo que estas las bestias matan por hambre, pero he conocido al ser humano en su actos más bajos, más perversos y más ruines que jamás pensé ni en mis más terribles pesadillas presenciar.
Actos verdaderamente viles cometidos contra pequeños seres indefensos llegaron a cambiar completamtne mi percepción del ser humano como ente civilizado e incluso llegarle a perder el respeto pero aclaro que por supuesto no a todos pero si llegue a sentirme profundamente decepcionada de la raza humana en general. Actos tan detestables que por poco logran quebrar mi propia fortaleza emocional y psíquica, por ello por un tiempo y por completa salud mental me aleje del rescatismo por dos años, ahora he vuelto mas moderada pero al fin vuelto, con un poco más de dureza en el alma para así tener el temple adecuado para no quebrarme nuevamente como en el pasado donde incluso junto con varias amigas protectoras de verdad deseábamos mejor igual desaparecer de la faz de la tierra al presenciar actos tan horrendos que por si mismos eran inaceptables, llegamos a pensar que vivíamos en una terrible pesadilla mas no en la realidad.
Así las cosas, el respeto hacia las almas menos favorecidas y más desprotegidas a los que nosotros les llamamos "los sin voz", o "nuestros pequeños hermanos", ha sido una constante en mi vida y por ello quiero aquí tomar este pequeño espacio para ir contándoles todos los horrores vividos pero también las cosas más hermosas, verdaderos actos de amor y de fé, verdaderos milagros de la vida misma, pequeños actos de verdadera constricción humana me hicieron recuperar de alguna manera un poco de respeto hacia nuestra condición de seres humanos.
Eh aquí el Diario de un perro:
DIARIO DE UN PERRO.
Semana 1:
Hoy cumplí una semana de nacido, ¡Qué alegría haber llegado a este mundo!
Mes 1:
Mi mamá me cuida muy bien. Es una mamá ejemplar.
Mes 2:
Hoy me separaron de mi mamá. Ella estaba muy inquieta, y con sus ojos me dijo adiós. Esperando que mi nueva 'familia humana' me cuidara tan bien como ella lo había hecho.
Mes 4:
He crecido rápido; todo me llama la atención. Hay varios niños en la casa que para mí son como 'hermanitos'. Somos muy inquietos, ellos me jalan la cola y yo les muerdo jugando.
Mes 5:
Hoy me regañaron. Mi ama se molestó porque me hice 'pipí' adentro de la casa; pero nunca me habían dicho dónde debo hacerlo. Además duermo en la recámara... ¡y ya no me aguantaba!
Mes 12:
Hoy cumplí un año. Soy un perro adulto. Mis amos dicen que crecí más de lo que ellos pensaban. Que orgullosos se deben de sentir de mi.
Mes 13:
Qué mal me sentí hoy. 'Mi hermanito' me quitó la pelota. Yo nunca agarro sus juguetes. Así que se la quité. Pero mis mandíbulas se han hecho muy fuertes, así que lo lastimé sin querer. Después del susto, me encadenaron casi sin poderme mover al rayo del sol. Dicen que van a tenerme en observación y que soy ingrato. No entiendo nada de lo que pasa.
Mes 15:
Ya nada es igual... vivo en la azotea. Me siento muy solo, mi familia ya no me quiere. A veces se les olvida que tengo hambre y sed. Cuando llueve no tengo techo que me cobije.
Mes 16:
Hoy me bajaron de la azotea. De seguro mi familia me perdonó y me puse tan contento que daba saltos de gusto. Mi rabo parecía reguilete. Encima de eso, me van a llevar con ellos de paseo. Nos enfilamos hacia la carretera y de repente se pararon. Abrieron la puerta y yo me bajé feliz creyendo que haríamos nuestro 'día de campo'. No comprendo por qué cerraron la puerta y se fueron. '¡Oigan, esperen!' Se... se olvidan de mí. Corrí detrás del coche con todas mis fuerzas. Mi angustia crecía al darme cuenta, que casi me desvanecía y ellos no se detenían: me habían olvidado.
Mes 17:
He tratado en vano de buscar el camino de regreso a casa. Me siento y estoy perdido. En mi sendero hay gente de buen corazón que me ve con tristeza y me da algo de comer. Yo les agradezco con mi mirada y desde el fondo con mi alma. Yo quisiera que me adoptaran y sería leal como ninguno. Pero sólo dicen 'pobre perrito', se ha de haber perdido.
Mes 18:
El otro día pasé por una escuela y vi a muchos niños y jóvenes como mis 'hermanitos'. Me acerqué, y un grupo de ellos, riéndose, me lanzó una lluvia de piedras 'a ver quién tenía mejor puntería'. Una de esas piedras me lastimó el ojo y desde entonces ya no veo con él.
Mes 19:
Parece mentira, cuando estaba más bonito se compadecían más de mi. Ya estoy muy flaco; mi aspecto ha cambiado. Perdí mi ojo y la gente más bien me saca a escobazos cuando pretendo echarme en una pequeña sombra.
Mes 20:
Casi no puedo moverme. Hoy al tratar de cruzar la calle por donde pasan los coches, uno me arrolló.
Según yo estaba en un lugar seguro llamado 'cuneta', pero nunca olvidaré la mirada de satisfacción del conductor, que hasta se ladeó con tal de centrarme. Ojalá me hubiera matado, pero sólo me dislocó la cadera. El dolor es terrible, mis patas traseras no me responden y con dificultades me arrastré hacia un poco de hierba a la ladera del camino.
Mes 21:
Tengo 10 días bajo el sol, la lluvia, el frío, sin comer. Ya no me puedo mover. El dolor es insoportable. Me siento muy mal; quedé en un lugar húmedo y parece que hasta mi pelo se está cayendo. Alguna gente pasa y ni me ve; otras dicen: 'No te acerques'.
Ya casi estoy inconsciente; pero alguna fuerza extraña me hizo abrir los ojos. La dulzura de su voz me hizo reaccionar. 'Pobre perrito, mira como te han dejado', decía... junto a ella venía un señor de bata blanca, empezó a tocarme y dijo: 'Lo siento señora, pero este perro ya no tiene remedio, es mejor que deje de sufrir'. A la gentil dama se le salieron las lágrimas y asintió. Como pude, moví el rabo y la miré agradeciéndole me ayudara a descansar. Sólo sentí el piquete de la inyección y me dormí para siempre pensando en por qué tuve que nacer si nadie me quería.
La solución no es echar un perro a la calle, sino educarlo. No conviertas en problema una grata compañía. Ayuda a abrir conciencia y así poder acabar con el problema de los perros callejeros
Saludos
6 comentarios:
en verdad me hiciste llorar con esta sinopsis de lo que sufren muchos millones de animalitos y nosotros a veces tan inhumanos dejandolos a su suerte y aprovechandonos de su condicion para patearlos,mojarlos y un sin fin de atropellos pero pues creo yo que el que nos juzga a nosotros tambien daremos parte a dios por esos actos viles de abuso muy bueno tu post gaby
saludines.
gabo de aca del norte si ► ñor
hola gabby,me siento tan triste de leer el diario de un perro,tmb en mi posibilidad yo rescato perritos abandonados, hace 2 semanas recogi un perrito salchicha, estaba paralizado de la parte trasera, lo abndonaron y estaba en un charco de agua sucia, lo lleve a mi casa,su mirada era triste,lo lleve al doctor,tenai problemas renales,estaba sifriendo asi ke lo dormimos,llore mucho porke cuando ibamos de regreso a la casa el levanto su carita y me veia como diciendo !no me duermas!lo abrase y le platike ke yo no queria que sufriera y que iba a estar mejor,ese mismo dia que los dormi llego una perrita, le puse LUNA,se quejaba,no estaba quieta ni un momento,la lleve a la casa y lleve a un doctor,tenia toda la boca infectada y con un olor nauseabundo,la perrita ya tenia mucho tiempo con ese problema,dejo de comer y ya no se levantaba,tmb la dormi,me duele tanto esta situacion,pero actuo como puedo,con todo y las deudas DIOS provee y permite que ayudemos a estos seres indefensos,GRACIAS GABBY por ser como eres
Hola Gabo:
Dichosos los ojos que te leen! Me congratulo con tus sentimientos tan nobles, es triste la situación de estas criaturitas indefensas y no nos queda más que velar por ellas.
Te mando un abrazo.
Anónimo:
Hola de verdad que leer la labor tan hermosa que has hecho y el de condolerte y solidarizarte con estas criaturitas tan hermosas me hacen más que rendirme y admirarte, sigue siendo asi como eres, te felicito, y te doy un gracias enorme por tu gran corazón.
Hola Gaby!!
Te felicito por publicar tus escritos sobre las criaturas mas indefensas y desprotegidas como son los animales en especial los perros,te comento que soy una defensora de ellos desde los 13 años, actualmente tengo 34 y es de las luchas mas dificiles que puedan existir,muy poca gente tiene conciencia sobre el sufrimiento de los animales,te pido no abandones tu espiritu guerrero de lucha, que gente como tu es lo que necesita el planeta, siempre hay gente nefasta como la que te escribio en el blog que te dedicaras a otras cosas, lo peor es que esa gente no hacen nada bueno por nadie, solo criticar, pero todo cae por su propio peso y creen que nunca la van a pagar, en fin lo que realmente importa es seguir ayudando y tratando de crear conciencia entre las personas,te mando un abrazo y muchas muchas gracias por ayudar no solo a los angelitos de 4 patas, si no tambien a las personas en el foro de las tarjetas, que ahorita tanto necesitamos los mexicanos de buenas asesorias y apoyo moral, saludos y hasta pronto!!
Anónimo;
Muchisimas gracias por tus conceptos y tus palabras de aliento ya que tu al igual que yo sabemos que la labor llevada a cabo en favor de las causas como la defensa de los animales es una labor titánica por que tenemos todo en contra, leyes ambiguas, poco apoyo de las autoridades y la indiferencia de la gente. Sin embargo las recompensas son el alimento del espiritú que nos permite seguir adelante.
Permiteme también a mi mandarte mis mas sinceros respetos y admiración por la labor que llevas a cabo y un gracias enorme por empatia hacia los indefensos.
Gracias
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