lunes, 17 de agosto de 2009

FORINAUTAS Y MI ENCUENTRO CON LA DERECHA EXTREMA


Forinautas y mi encuentro con la derecha más recalcitrante de la red: SDM


Y bueno amigos quien me diría que en algún momento tendría que convivir con personas de mentalidad derechista pero no cualquiera, ni media, ni intermedia, si no la más radical de la red.

Debo confesar que ya les había leído, su blog me parecía simplemente una cacofonía inconexa de ideas entre homo fóbicas, racistas, clasistas y por supuesto insensibles.


Sin embargo jamás por mi mente se me hubiera ocurrido convivir con ellos por propia voluntad, la respuesta salta a la vista: la gran mayoría de las personas que profesamos la ideología de izquierda, somos individuos sensatos, ecuánimes pero ante todo sensibles a la problemática que nos rodea, tanto social, como económica, pero sobre todo la realidad que pega directamente a las clases más desprotegidas, esa realidad apabullante, llena de grandes divergencias, de grandes desigualdades.

Pero bueno, ya llevaba alguna carrerita en foros políticos, cuando un buen día me atreví a inscribirme en el extinto foro del Sendero del Peje, dónde conocí grandes participantes, grandes individualidades de las cuales me apabullaban sus dotes argumentativas, pero sobre todo sus grandes ideales, un mal día por decisiones de sus fundadores el foro simplemente dejo de existir. Un buen amigo al cual conocí en ese foro Legionario junto Masiosare me invitan a un proyecto llamado Forinautas. En ese espacio que se planteaba de manera más libre de pensamiento, más universal en ideas, me parecía sensacional. Posteriormente también fallecé ese foro y se crea el 2do. Forinautas.

La idea era en efecto igualmente seguir la línea de libre albedrío en cuanto a pensamientos, filosofías y sobre todo de ideologías. Estaba sencillamente fascinada ya que en la vida real, la concurrencia con personas de diferentes ideologías siempre me ha parecido bastante remunerativa en cuanto a impresiones y a conocimientos, tanto como experiencias enriquecedoras. Pero lo que me encontré en el espacio lúdico, simplemente me desilusiono, es más me horrorizó.

Me encontré de frente con individuos cuyo dogma es la stereotipación de las personas con ideología de izquierda como seres inferiores, defenestrándolas con dejos racistas, homo fóbicos, misóginos y altamente ofensivos.


Sujetos que te respetarán mientras no les cuestiones su manera de expresarse, y a quienes no les cuestionan nada, que se muestran sumisos, condescendientes, les dejan sentir que les hacen un favor al hablarles, pero a quienes como yo, les enfrentamos y les cuestionamos su deplorable conducta incluso de forma respetuosa, enseguida somos atacadas.

La burla, la falta de argumentación, su cerrazón ideológica pero sobre todo su insensibilidad me hacen presuponer que son personas con una baja autoestima, que sufren también los embates de las injusticias sociales que vivimos en general casi todos los mexicanos, pero que en ellos lo advierten como algo natural, a lo cual los demás no deberán pronunciarse en contra.

Y pues no, soy de izquierda contestaría, que no se deja, no se amilana para expresar mis inconformidades, mis desilusiones de este estado fallido, y que por supuesto menos me amilanaré ni me achicaré ante individuos de corta mentalidad y más cortas expectativas de vida.


Mi vida ha sido una serie de reto tras reto uno tras otro, que he sabido sortear con dignidad y con soltura, y mis proyectos ciertamente casi todos tienen una finalidad que conlleve resultados, que traiga aparejada una certeza de mejorar ya sea mi estilo de vida, o mi mentalidad , o mi economía.

Así es que consideré que mi experiencia se vería enriquecida con el trato con personas de otra ideología, en espacios lúdicos, pero la experiencia ha sido terriblemente decepcionante. Jamás había encontrado personas tan altamente decepcionantes y vaya que he conocido individuos de diferentes estratos sociales, diferentes religiones, (judíos musulmanes, masones) de diferentes ideologías (izquierda extrema, derecha moderada, derecha extrema) y de diferentes nacionalidades, (españoles, vascos, norteamericanos, franceses, alemanes, rusos) y les he tratado en sus ámbitos, en sus espacios, y jamás me había encontrado con algo semejante.

Sin embargo parece que el Internet les proporciona a ciertos individuos un alo de confort para dejar brotar sus más íntimos demonios internos que disfrazan de ideología de derecha, pero simplemente son personas con mentalidades difusas y conductas retrogradas, que en la vida real, serian simplemente rechazadas si se comportarán tal cual lo hacen en la red, por que demuestran conductas altamente antisociales.

En fin, esa experiencia de alguna manera me ha dejado una gran enseñanza y me ha hecho aún más sensible aún, pero aún más allá me ha dejado la certeza y la alegría de saber que soy de izquierda.

Seré de izquierda por siempre.

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